La personalidad – Estados del Yo

Erick Berne, creador del Análisis Transaccional establece la personalidad como una estructura formada por tres sistemas dinámicos, diferenciados e integrados, coherentes de pensamiento y sentimiento.

figura1

Padre

Contiene las estructuras, mensajes y conductas incorporadas de fuentes externas. Grabación de la percepción del individuo de lo que sus padres y otras figuras significativas de su vida realizaron. «Lo que se debe hacer»

Adulto

Sistema de procesamiento de información que evalúa objetivamente la realidad. Se nutre de datos del mundo exterior e interior. Enuncia hechos, calcula probabilidades y toma decisiones. «Lo que conviene hacer»

Niño

Centro de pulsiones, necesidades y sentimientos. Contiene las grabaciones del mundo afectivo de la infancia, de sus respuestas a él y de la conductas de adaptación que asumió. «Lo sentido de la vida»

Los estados de Yo están presente en cada persona pero solo uno de ellos asume la dirección, expresión, el control de la personalidad en un momento dado. Se puede determinar que estado del Yo está activado observando el comportamiento de la persona, los aspectos no-verbales e interacciones.

Al observar en que estado del Yo te encuentras y si este es adecuado para la situación. Por ejemplo, actuar desde el estado del Yo Niño cuando la situación requiere una toma de decisiones laboral puede ser contraproducente. Responder a nuestra pareja desde el estado del Yo Adulto cuando lo que nos está requiriendo es caricias puede dar paso a una situación de desencuentro.

Resiliencia

La resiliencia es la capacidad de una persona o grupo para seguir proyectándose en el futuro a pesar de acontecimientos desestabilizadores, de condiciones de vida difíciles y de traumas a veces graves.

Es un término que proviene de la física y se refiere a la capacidad de un material para recobrar su forma después de haber estado sometido a altas presiones. Por lo tanto en las ciencias sociales podemos deducir que una persona es resiliente cuando logra sobresalir de presiones y dificultades.

La capacidad de resiliencia de una persona nos obliga a nosotros como profesionales a focalizar nuestra búsqueda en los recursos personales y ambientales para hacer frente a los conflictos.

Te invito a que seas como el loto real, que nace entre aguas turbias y no obstante, lotoblanco y puro, exhala divinos perfumes a su alrededor

La flor de loto es la única flor que es fruto y flor a la vez, esto encierra un principio budista que es la causa y efecto, toda acción que realizamos es una causa (semilla) que tiene ya en potencia en sí misma el efecto (flor).

La ostra y la perla

 

 

En la parte interna de la ostra se encuentra una sustancia lustrosa llamada nácar. Cuando un grano de arena penetra en la ostra, las células de nácar comienzan a trabajar y cubren el grano de arena con capas y capas y más capas de nácar para proteger el cuerpo indefenso de la ostra. Como resultado, se va formando una hermosa perla.

Una ostra que no haya sido herida de algún modo, no puede producir perlas. Porque la perla es una herida cicatrizada.

Sé como la ostra que transforma aquello que la daña en algo bello y único. Todo lo que te acontece, tiene el fin y el sentido que tu quieras darle, está en tu poder decidir hacer de eso una perla o dejar una herida eterna en tu alma. 

«Con tu fuego interior, o con tu luz interior purifica y hermosea todas las cosas»

  Proverbio Lhama